todo fluye y nada calla
creo en un dios universal
desprovisto de hombres y mujeres
intentando secuestrarle en recintos cerrados,
en leyes y reglas que delimitan
ese amplio amor que en nosotros coexiste,
a pesar de nuestras intolerancias,
las eternas dudas y los temores.
todo suena y todo canta,
todo fluye y nada calla.
un dios universal que no se capitaliza,
que es uno entre todos y entre todos uno,
con las plantas y los animales,
lo que vive, es y fue,
lo que será,
las rocas y los ríos,
el mar y los caminos.
todo suena y todo canta,
todo fluye y nada calla.
un dios que escuchamos
cuando le necesitamos
y nos espera cuando andamos
dando tumbos por la vida,
un dios paciente que nos da la libertad
de ser y de crecer,
de abandonarle y descubrirle,
de apenas percibirle.
todo suena y todo canta,
todo fluye y nada calla.
un dios que nos mira con tristeza
cuando destruimos la tierra,
un dios paciente que espera
lo mejor de nuestra esencia,
la calidez de nuestras manos,
la suavidad de nuestros pasos,
los cantos que en silencio
le entregamos.
todo suena y todo canta,
todo fluye y nada calla.
voy hacia ti
cuando ando por tus caminos,
comparto tu amor
entre mis versos y los cánticos,
las calladas entonaciones que acompañan mis noches,
abierto hoy y siempre quiero estar,
para marcharme contigo
y encontrar la senda
de un universo
que a veces se asoma, tras de ti,
cuando todo suena y todo canta,
cuando todo fluye y nada calla.