

no puedo llenar mis horas
no puedo llenar mis horas
con tu ausencia,
no puedo.
no puedo llenar mis horas
con mi tiempo,
con mi quehacer cotidiano.
no puedo llenar mis horas
con mis sueños,
pues te estás intercalando en ellos,
ocupando uno a uno los espacios,
las grietas, los momentos.
no puedo llenar mis horas
lo único que cargo es tu ausencia,
es esperar tu presencia,
la de tus ojos, tu mirada,
la de nuestro hablar continuo.
no puedo llenar mis horas
con mis palabras,
no puedo llenar mis horas
ni con mis propias manos,
no puedo llenar mis horas
ni con mis propios minutos.
cali, septiembre de 1982