no debería decirte nada más
I
camina,
no debería decirte nada más,
camina.
fue uno de tus momentos más sublimes,
cuando te erguiste,
te soltaste al espacio
y encontraste la verticalidad.
no te recuerdas los aplausos,
los besos y abrazos
con los cuales celebraron tu ascensión,
y así, sin más, cambiaste la perspectiva;
te hiciste bípedo, casi humano.
vuelve a tus primeros pasos,
siente la magia
de haber encontrado el universo,
llena tus pulmones de aire,
dale libertad al viento.
camina con todos
los que antes de ti han caminado
los que se fueron
y caminando te acompañan,
camina con ellos, tráelos a ti
y camina, anda,
atraído por el viento,
aún te esperan los momentos
más sublimes.
II
camina,
ve dejando afuera las preocupaciones,
limpia tu frente, respira,
este es tu momento, tus pasos,
atrás quedan tus huellas,
adelante va tu sombra, tus esperanzas,
camina.
camina, sal por los caminos,
un parque, una nueva calle,
busca andenes compañeros
lejos de los carros y el humo,
busca senderos, atajos,
encuentra la lentitud de tus pasos.
si limpias tu mente
tu corazón será libre de sentir
y llenarse de la alegría de vivir
y erguirse por encima
de los dolores cotidianos que te aquejan.
con tu mente en paz y tu corazón abierto,
tu alma se irá despertando,
el caminar lento le devolverá
su eterna presencia
y sin que te des cuenta fluirá
y te llevará de la mano
a la paz que reside en ti
y que tantas veces olvidas.
no debería decirte nada más,
camina.
III
camina,
busca los árboles,
conócelos,
mira sus ramas, sus hojas,
pon tu mano en su tronco
y siente su savia subir de la tierra,
comparte tu energía vital,
siente que eres uno con él y él contigo;
tus dedos son raíces del tiempo
encontrando su áspera corteza.
siente,
déjate llevar.
camina,
busca un río, conócelo,
observa como el fluir del agua
encuentra siempre un cauce,
como suaviza las rocas,
abreva las raíces de los árboles,
corteja las espigas, las cañas, los juncos,
acoge pájaros en sus orillas,
ranas y sapos que al verte se ocultan.
pon tu mano en su corriente,
siente que eres uno con él
y él contigo;
tus dedos son raíces del tiempo
encontrando su líquida nobleza.
camina,
sigue tu verdad,
no importa cuál camino se abra a tu paso,
cual sendero acoja tu rastro,
camina,
siente el viento,
el aire,
la luz,
no olvides lo que dejas atrás,
escucha.
IV
camina,
fluye,
déjate llevar.
puedes dudar,
puedes encontrar tu soledad
puede desorientarte el cielo,
perder tu brújula compañera
perder de vista el horizonte,
pero no te detengas,
camina,
camina,
mientras la verdad que necesitas
guie tus pasos,
mientras dejes que te iluminen
los rayos del sol,
la mañana limpia,
camina,
que las pequeñas alegrías te encuentren,
que una lluvia te refresque la frente.
camina,
mientras tu verdad
sea un coro de voces
y tus pasos no marchiten las huellas
que otros han dejado en el polvo,
camina.
no hay otro propósito,
ninguna otra decisión,
solo camina.
vuelve a tus primeros pasos,
siente la magia
de haber encontrado el universo,
llena tus pulmones de aire,
dale libertad al viento,
aún te esperan
los momentos más sublimes.
no debería decirte nada más,
camina.