danzando en la arena
a maría cecilia….
ya no me esconderé tras la falda de mi madre,
al ver tus trenzas y sentir tu mirada,
ya no te guardaré puesto en el bus para que te sientes a mi lado
y me inundes de claros amaneceres,
ya no miraremos juntos nuestra ciudad transcurrir plácida por la ventana,
ni tus ojos me buscarán ya
entre uniformes y maletines.
ya no escribiré tu nombre al margen de mis dudas y mis cuadernos
y en mis libros detrás de mis temores,
no caminaré hasta tu puerta con un nudo tímido en la garganta,
rogándole a dios que tu me abrieras,
ya no te veré danzando en la arena blanca
entre congas y tambores,
entre sones y calipsos hasta vencer la madrugada.
no te buscaré entre los que se han marchado,
te descubriré en los ruidos de ese bosque frío y en la neblina que baja de tu montaña,
pero ya no te podré decir como te extraño,
ni cuánto me duele tu ausencia
cuando aparece tu risa libre
entre tus fotos y mis recuerdos.
cómo hacerte saber,
que en mi alma y en mi piel,
han quedado tantas palabras escondidas,
esperando que algún día las libere el silencio,
y me acerque despacio a tu nuevo horizonte,
desconocido,
frágil y eterno.