andan chismes
hay chismes que rodean mis oídos,
los he escuchado pasar
como alucinaciones diminutas
escapándose de la fantasía,
ya lo sé,
andan chismes de que te quiero.
los chismes se han regado
por mis venas,
andan recorriendo mis arterias,
han llegado a mis ojos
y los he tenido que cerrar,
se han intercalado en mi mente
y no me dejan pensar,
están llegando a mi piel
y eso no lo aguanto más.
lo sé,
andan con el cuento
de que te quiero
le ha dado por inventar historias
que abordan mis sueños
y se aparecen de pronto
en mis mañanas,
frescos, tranquilos, amanecidos,
con sabor a tí,
se me introducen en mis cobijas,
bajo mi almohada
y me dejan bocarriba,
perplejo,
pensando en tí.
lo sé,
andan chismes
de que te quiero.
no sé quién originó
tan descarriada mentira,
cuál fué la clara imaginación,
el deductor de oficio,
el escrutador de mi vida,
el desempleado total
que se inventó el incidente,
que regó el chisme,
que puso el grito en el cielo.
lo sé,
andan con el cuento
de que te quiero.
si te llega el chisme
no lo creas,
alguien dentro de mí
le dió rienda suelta
a una fábula de su invención
y ha salido corriendo
con el chisme bajo el brazo,
pregonándole a la vida
que te quiero.
junio de 1984
quand l’oiseau arrive
s’il arrive
observer le plus profond silence
attendre que l’oiseau entre dans la cage
et quand il est entré
fermer doucement la porte avec le pinceau
puis
effacer un à un tous les barreaux
en ayant soin de ne toucher aucune des plumes de l’oiseau…
poème de jacques prévert